Han pasado varias temporadas de playa, y tú has ido retrasando la operación bikini aunque mueres de ganas de ponerte uno y lucirlo. Harta de ver cómo tu cuerpo cambia a peor y te duele todo, has decidido hacer ejercicio, ¡por fín!.
El running
Como todo, tiene su ritmo, y tu cuerpo y tú parecen ir por caminos diferentes. Lo mejor de haber empezado a hacer ejercicio es el primer paso; lo peor, todo lo que le está pasando a tu cuerpo estos días, según tú, porque tal vez no conoces el proceso.
Te duele todo
Segura de que te duelen partes de tu cuerpo que desconocías, viejas lesiones que pensabas curadas, músculos que antes no te dolían, incluso tus gemelos (músculos) de repente toman una cara diferente. Paciencia, calma, buen ritmo y constancia.
Ver las cosas que no son como si lo fueran
Eso hago yo, deja volar tu mente que se visualice corriendo durante horas a un ritmo alto, sudando pero avanzando. La realidad es que el primer minuto lo haces de fábula, pero conforme pasan los segundos no puedes con tu alma. No hay prisa, no necesitas demostrar nada a nadie, sólo empezar y no parar. ¿Tu ritmo es lento? Perfecto, irá mejorando; ¿Te cansas mucho? Imagino no esperarás que tu cuerpo esté en forma después de años sin ejercitarte.
Respecto a tu mente, no te vas a convertir en un ultra maratonista la primera semana, pero que el "bichito" de ser más sano, saludable, perder algo de peso y sentirte mejor al subir escaleras sean tu primer paso de gigante.
LOS ZAPATOS, FUNDAMENTALES
Siempre escucho: yo corría mucho, jugaba básquet, fui seleccionad@ de mi colegio. Bien, todo eso es pasado, y ahí debe quedarse, como un bonito recuerdo. Porque la realidad es que recurrir a esos viejos zapatos que no botaste por si algún día los volvías a usar (y está bien ese optimismo), pero seguro no habrás podido dar ni un paso y se habrían desintegrado.
Es lo mejor que te podía pasar, fueron buenos, pero ahora descártalos y usa unos nuevos, luego veremos si es necesario cambiar por unos mejores, un par de zapatos inadecuados pueden llevarte a lesiones irremediables.
Prueba de esfuerzo
Es primordial, y obligatoria para empezar a ejercitarte, sobretodo si piensas hacerlo en serio; no importa si tu razón es salud, perder peso, ponerte en forma, un profesional te ayudará a saber a ciencia cierta cuál es el estado de tu cuerpo, saber si pisas correctamente, la técnica de carrera, si llevar tu esfuerzo a un nivel superior o inferior, cómo está tu ritmo cardíaco, incluso si necesitas plantillas para evitar lesiones y molestias. Además como mi médico siempre me recuerda: "una prueba de esfuerzo al año es obligatoria para todo el que practica un deporte". De este modo se puede controlar la forma física y salud a medida que cumplimos años.
Guía para empezar
De manera lenta, pero segura. Si hace años no practicas ninguna actividad, empieza por correr con una secuencia fácil y que puedas repetir al menos 3 veces por semana ¿Puedes sacar 30 minutos 3 días a la semana?
Secuencia:
- 5 minutos caminando
- 2 minutos corriendo
- Repite hasta completar 30 minutos
- Sostén este ritmo por 2 semanas e incrementa.
- 4 minutos andando
- 3 minutos corriendo
- Sostén este ritmo por 3 semanas e incrementa.